LECTURAS 2017/2018

26 SEP 17 Manual para mujeres de la limpieza - Lucía Berlin

30 OCT 17 Patria – Fernando Aramburu

21 NOV 17 24 horas en la vida de una mujer – Stephan Zweig

19 DIC 17 La calle de la judería - Totti Martinez de Leza

30 ENE 18 Demonios familiares – Ana Mª Matute

27 FEB 18 Media vida – Care Santos

20 MAR 18 El blog del Inquisidor - Lorenzo Silva

24 ABR 18 Mi recuerdo es más fuerte que tu olvido – Paloma S. Garnica

29 MAY 18 El domingo de las madres – Graham Swift

26 JUN 18 Ojo de pez - Antonio J. Ruiz Munuera

viernes, 26 de abril de 2013

Cuando leas esta carta de Vicente Gramaje



Cuando leas esta carta, decidirás escribir un libro, porque si él puede tu también.

Un libro sencillo que entretiene bien estructurado, demasiado descriptivo pero que a vez nos relata una parte de la historia de España poco conocida o poco publicitada y a su vez nos cuenta la vida del narrador o protagonista. Las dos historias están bien ensambladas dentro de la novela.

Quizás puede decepcionar no leer la carta, pero es un final lógico y que evite que decepcione su lectura.

Lo más destacable quizás es los diferentes sentimientos ante la muerte en diferentes momentos y en diferentes personajes.


Puntación: 7.25

“Solo se equivoca, el que decide equivocarse, es un privilegio de los que toman decisiones”

Carlos Salem Sola (Buenos Aires 1959). Tiene 54 años.



Es escritor, poeta y periodista, desde el '88 vive en España pero hasta 2008 no comienza a escribir poemas y novelas, desde entonces no ha parado; 5 novelas, varios poemarios, dos libros de relatos y una obra de teatro, todo eso en 4 años.
Como periodista, llegó a dirigir El Faro de Ceuta y el de Melilla, actualmente es colaborador de distintos medios de prensa y radio.
Mantiene un blog activo, elhuevoizquierdodeltalento.blogspot.com: su última entrada se llama 'uso de las preoposiciones según el PP', a propósito del caso Bárcenas.
A alguien le pagaron
ANTE la pasividad de otros
BAJO cuerda
CON dinero negro
DE alguien
DESDE hace años
DURANTE años
EN un pacto
ENTRE dirigentes
EXCEPTO los pringados que miraban
HACIA otro lado
HASTA que se supo
MEDIANTE una venganza
PARA cambiar a los que mandan
POR otros similares
SALVO error u omisión
SEGÚN alguno se quede
SIN su
SOBRE
TRAS tras rezar en maitines.



Lo que sobra

Ahora que todo
ha quedado en nada
me sobran los dedos que hasta hace poco se turnaban
para buscarte resortes y cosquillas
en la compleja maquinaria que ocultas entre las piernas

Ahora que todo
ha quedado en nada
mi boca sólo sirve para boquear besando al aire del cigarro
o masticar alguno de tus platos favoritos
como si te masticara
Y no es lo mismo.

Ahora que todo
ha quedado en nada
mi sexo se convierte en un absurdo artilugio para mear llorando
una molestia que me impide dormir de lado
un polo de ceniza y fresa
un tizón helado

Ahora que todo
ha quedado en nada
los poemas que escribo me suenan a declaración de la renta
y en cada verso me defraudo
y en cada verso te desgravo
intento la venganza de un soneto
pero siempre me rima con “afrenta”
y todas las palabras se me deshacen entre los verbos

Ahora que todo
ha quedado en nada
mis ojos son tajos en la cara
que froto contra la pantalla de la tele
o en tu inolvidable sonrisa que se burla
en cada foto.

Ahora que todo
ha quedado en nada
me sobra todo.
O tal vez no.
Creo que no.
Seguro que no.
No me sobran
ni los dedos ni la boca ni los versos
Ni los ojos ni la polla.
Me sobras tú.
Por eso me pido otra cerveza
y espero ver entrar por esa puerta
a la mujer
que te borre para siempre
esa jodida sonrisa
de las fotos.
Sus novelas, hasta hora se pueden enmarcar dentro del género policíaco, especialmente las tres primeras, dónde los personajes aparecen cruzados, pero  cuyas tramas son completamente independientes entre sí y por las que ha ganado diferentes premios como el de la Semana Negra de Gijón y el premio NOVELPOL.
'Pero sigo siendo el rey' es su tercera novela, publicada en 2009 es su última obra para la editorial Salto de Página (la última novela la ha sacado en RBA) y ha resultado merecedora del premio Mandarache 2012, donde también he visto que fue finalista Isaac Rosa por la novela 'El país del miedo', que curiosamente es la novela que yo propuse y que traigo por si a alguien le interesa.
Como comentario personal decir que, Pero sigo siendo el rey es una 'novela de carretera' de ida y sobre todo de vuelta para el protagonista y, en mayor o menos medida, sus acompañantes.
A mi juicio consta de tres partes de interés personal decreciente.
La primera parte es la que más me gusta, llena de clichés del género negro; Nos cuenta la historia de Arregui, hombre duro que no se casa con nadie, con un pasado que lo atormenta y que le impide avanzar que, pese a muchas reticencias decide hacer un viaje para buscar al Rey fugado.
En ella, Aguirre suelta frases y pensamientos que noquean como:
La honestidad en un político, es un estado gaseoso que se puede dispersar en cuanto se abren las ventanas de la necesidad, los intereses del partido, o el cariño por la poltrona que ya va tomando forma de culo.
La furia es como unos calzoncillos apretados: te recuerda que tienes cojones, pero acaba dejándotelos escocidos.
Una vez encontrado al Rey, inician la segunda parte de la novela, un recorrido por una España rural, difusa y subrealista, donde a Aguirre y al rey se les unen dos personajes más, igualmente perdidos que intentan encontrar el camino con el que proseguir sus vidas. Por esta parte, he leido en varias críticas comparaciones con la película 'amanece que no es poco', comparaciones que me parece, le quedan un poco grandes a esta novela.
La última parte del relato, la completan las peripecias por Madrid, antes de poder entregar al rey, y es dónde me parece que le obra decepciona más, porque yo me puedo creer que haya dos hermanos que todavía continúan en Guerra Civil o que Luis Cobos busca la melodía en su Rolls Roy en algún lugar entre Extremadura, Castilla y Madrid, pero que el Rey esté disfrazado de mariachi en una manifestación mientras le persiguen ya me parece demasiado... En fin, que lo veo todo muy forzado para que todo tenga un final feliz donde los buenos ganan y los malos pierden, especialmente Aguirre, que consigue pasar página y abrazar al amor.
Pero a mi juicio dónde la novela flojea aún más es en la imágen que se proyecta del Rey de España, completamente estereotipada como la de un ser bobo, bonachón, inocente y campechano y ahí es donde la novela se vuelve más inverosímil todavía; nuestro rey no se va a buscar al niño a Portugal, se va a Botwana a cazar elefantes con su querida. Nuestro Rey no es un ser estresado por el trabajo y las presiones derivadas de su cargo; es un mantenido a la sopa boba que ve como sus súbditos son estafados desde su yate, regalo de Díaz Ferrán y otros amigos mallorquines. Un Rey con funciones inútiles para los españoles, pero que no duda en ser mantenido a consta de nuestros bolsillos desde la más absoluta falta de transparencia. Un Rey que permitió que su yerno mangara todo el dinero público del que fue capaz y en vez de denunciarlo optó por desterrarlo,... En definitiva, Aguirre con los huevos que tú tienes, tenías que haberle cantado al Rey las cuarenta, convencerlo para que se fuera con su amante y obligarlo a abdicar a favor de su hijo.